"Y ustedes no han recibido un espíritu de esclavos para volver a caer en el temor, sino el espíritu de hijos adoptivos, que nos hace llamar a Dios: ¡Padre!” (Rm 8,14-15).

El don de la piedad es sinónimo de auténtico espíritu religioso, de confianza filial con Dios, de esa capacidad de rezarle con amor y sencillez que es propia de las personas de corazón humilde.

No es como ,dice el Papa Francisco cerrar los ojos, poner cara de bueno y fingir ser santos. Este don nos permite alegrarnos con los que rien y llorar con los que sufren. Nos abre a la correccion fraterna y a ayudar a los necesitados.

Gracias a este don podemos sentirnos hijos de Dios y tenemos el deseo de buscarle en la oracion y la alabanza, nos motiva a hacernos amigos del Señor.

Pidamos al Espiritu Santo el don de piedad para ser adoradores en Espiritu y en verdad.

"Señor, a veces puedo sentirme solo y abrumado, tanto que me comoorto de manera egoista y grosera hacia los demas. Que tu Espiritu Santo me llene del don de piedad para que mi relacion contigo crezca tanto que me parezca cada dia mas a ti y pueda amar a mis hermanos como tu me amas. Que tu seas mi amigo por siempre." Amen.