"A mí me agrada hacer tu voluntad, Dios mío; ¡llevo tu enseñanza en el corazón!" Sal 40,8

El temor de Dios es un don que nos afianza en la fidelidad a El no por miedo sino por amor. Al igual que un niño se porta bien para no herir a su padre, el cristiano cumple la voluntad de Dios para darle gloria aunque le cueste. Este es el don que permitio a Jesus entregarse a morir en una cruz para cumplir su mision.

Servir al Señor tiene su precio pero la recompensa, aun siendo en la otra vida, vale mas que cualquier sufrimiento terrenal. 

Puede que en este momento estes debatiendo entre decir una mentira para evitar quedar mal o quizas       haya alguna relacion prohibida que te atrae, etc. cualquiera que sea la situacion elige agradar a Dios y saldras victorioso aunque de momento no lo parezca.

" Señor, quiero amarte hasta tal punto que prefiera mil veces la muerte antes que ofenderte. Me arde el corazon de amor por ti, llename de temor a ofenderte, que mi deseo de agradarte sea mayor que cualquier tentacion o trampa del enemigo. Amen"