Mientras Moisés tenía en alto la mano, vencía Israel.Ex17,8

En estos últimos días he estado más propensa a desanimarme por los problemas que he estado teniendo últimamente, ayer mi esposo me increpaba al respecto y sabía que tenía razón, no puedo desesperarme ante la adversidad sino sólo confiar en el Señor, las lecturas de hoy, por la misericordia de Dios hacia mi, me confirman lo mismo, mientras tenga mis manos levantadas venceré. Los problemas irán y vendrán pero si confiamos en nuestro Padre Celestial y dirigimos la mirada hacia El y no a lo que no podemos controlar, sin importar el tiempo que dure la batalla, la victoria será nuestra. En el evangelio nos dicen bien claro que no podemos cansarnos de orar porque Dios escuchará nuestras oraciones y las responderá, sólo debemos clamar a El noche y día. No sé por lo que estás pasando tú hoy, pero si en lo humano ya has hecho todo, dejaselo a Dios levanta tus manos y permite que El obre con poder en tu vida, juntos cantemos una alabanza en su Nombre:

"Oh, Dios, Creador del Universo, del cielo y la tierra, tú tienes el control de todas la cosas y nada ni nadie puede resistirse a  tu voluntad; sé que tu amor por mi es real y por eso vengo a ti para poner mi situación en tus manos para que tú me ayudes a salir victorioso de ella, porque tuyo es el reino, el poder y la gloria. Amen"

"Mejor: ¡Dichosos los que escuchan la Palabra de Dios y la cumplen!"Lc 11,27-28

En este texto pareciera que el Señor desprecia a su madre, sin embargo, nadie concuerda más con este perfil que ella, María escuchó y cumplió en todo la palabra de Dios, lo que le da el honor de ser la primera evangelizadora porque llevó la buena nueva a su prima Isabel. El mérito de María, más que guiar a su hijo por el buen camino, es que al igual que Abraham, creyó contra toda prueba, enfrentó las dificultades que se le presentaron en silencio y paz, guardando todo en su corazon. Su ejemplo nos enseña a meditar en los misterios de Dios, aceptar aquello que no podamos entender con una humildad que no creo reconocer en ningún otro humano de la biblia, aparte de su propio hijo, y manteniendose firme y de pie ante los problemas por más dolorosos y grandes que sean. Muchos hablan de Pablo, de José, de Pedro, Raquel, Ruth o de cualquier otro, cuando la madre de Jesús fue fiel en todo y no hace más que recordarnos en todo momento, aquellas palabras que dijo en Caná :"Hagan lo que EL les diga."

"Gracias, Señor, por dejarnos un ejemplo vivo en tu madre de que una mujer normal puede llevar una vida santa, permite que podamos darle el lugar que a ella le corresponde en la historia de la salvación sin ponerla por encima tuyo, pero tampoco ignorarla. Que puedan decir de nosotros también al momento de morir, éste escuchaba y cumplía la palabra de Dios."

...te preocupas y te agitas pr muchas cosas; y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. Lc10,41b-42a

Estoy esperando un diagnóstico médico, leer estas palabras me hacen reír porque justo antes de empezar a orar pensaba en qué haría si me dijeran que tengo alguna enfermedad terminal, qué sentiría y si lo utilizaría para dar testimonio de Dios. El, en su infinita misericordia, me recuerda que en vez de preocuparme o agitarme, haga lo que tengo que hacer: esperar en El, confiar en que El tiene control sobre mi vida y que lo que permite siempre es para bien.

"Amado, Señor, gracias por tu cuidado especial conmigo porque siempre me respondes con amor. Quiero hoy postrarme ante ti y simplemente descansar en ti."Amén

"Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer."Lc 17,10

El reconocimiento por nuestro trabajo es algo que todos buscamos hoy en día, tener una buena posición, que todos digan lo bien que hacemos lo que hacemos, ser lo mejor en nuestra categoría...pero en el mundo espiritual eso es lo de menos, no hay más reconocimiento que el hecho de obtener la vida eterna, aunque no sé si se puede pedir algo mejor en la vida, el punto es que amar, respetarnos, ser fieles, servir, predicar, etc no es ningún motivo de orgullo ni de reconocimiento sino nuestro deber como cristianos.
Yo creé este blog porque necesitaba compartir con la mayor cantidad de personas posibles lo que Dios ha hecho en mi vida, porque me es imposible tener tan buenas noticias y no decírselo a nadie, ¿cómo dejar de hacerlo? Sería un desperdicio, a menudo recibo comentarios de mis amigos sobre lo que escribo y en verdad es bueno sentir que lo que haces ayuda, pero no es motivo para que mi ego se inunde, sólo siento la satisfacción de saber que estoy haciendo lo que tenía que hacer, no vino de mi sino de Dios que nos ama tanto que inspira tanto el querer como el hacer, no hay nada de qué enorgullecerse porque todo me ha sido dado, nada es mío, por tanto no merezco reconocimiento alguno sino Dios que es el dueño de estas palabras....

"Señor, perdoname si en algún momento he querido ser reconocido por hacer las cosas que tú me inspiras hacer, perdoname si no te he dado la gloria en ese mismo momento, quita en mi cualquier prepotencia o necesidad de reconocimiento, al contrario, dame un corazón agradecido porque me has dado la sabiduría, valentía y la creatividad de hacer lo que me mandaste, predicar el evangelio a toda criatura. Amen"

La visión espera su momento, se acerca su término y no fallará; si tarda, espera, porque ha de llegar sin retrasarse. Hab 2,3

Lo que el Señor promete que se va a cumplir, se cumple sin importar cuánto dure, llegará en el momento indicado. Muchos no ven realizadas las promesas de Dios porque se desesperan y al igual que Sara (la esposa de Abraham) toman decisiones por desesperación en contra de lo que se nos ha prometido. Estas decisiones siempre acarrean tristeza y dolor porque lo que no viene de Dios siempre nos da problemas.

Dios ha prometido que estará con nosotros todos los días hasta el fin de los tiempos, que nos enviará su Espíritu Santo para guiarnos y consolarnos, pero lo más importante, que si creemos en El tendremos vida eterna. Hay otras promesas más particulares que nos llegan en los momentos de oración o por algún hermano que nos sirve de mensajero, pasan años y aún no las vemos ni cerca,pero no debemos desesperarnos porque El ha prometido que se cumplirán en el momento adecuado.

¿Qué hacer pues, mientras esperamos? Orar, orar y orar, pedir en todo momento la ayuda del Consolador para que con los dones espirituales podamos mantenernos firmes en la espera, aprovechar para servir en algún ministerio, entregarnos más a nuestra comunidad, en fin, todo aquello que le agrada a Dios de forma que cuando llegue la bendición sepamos realmente apreciarla.

"Dios mío, no sé hasta cuando podré esperar esta promesa que veo cada día más lejana y siento que me desespero conforme pasan los días sin suceder nada que cambie mi situación actual, más bien empeorándose todo, pero yo sé con mi corazón y contra toda prueba que tú eres fiel y vas a cumplir los deseos que pusiste en mi corazón, sólo te pido que aumentes mi fe para mover las montañas de mi incredulidad y darte gloria en todo momento, aún no reciba nada de ti. Amen"

Me estuvo bien el sufrir, así aprendí tus mandamientos. Salmo 118

El salmista, al igual que muchos de nosotros reconoce que el sufrimiento, aunque no es algo agradable, siempre nos ayuda a sacar a la luz las verdades de nuestro corazon. Si recibimos paz en medio de la prueba, permanecemos fieles a nuestro Padre entonces hemos madurado en la fe, pero si al contrario nos desesperamos, empezamos a renegar de Dios y a decir que no se puede ser bueno o preguntarnos por qué nos pasa esto a nosotros y a actuar como si no conocieramos al Creador de todas las cosas, debemos hacer un pare y analizar nuestra fe porque si nos sentimos así no estamos dando testimonio de Cristo en nuestras vidas y necesitamos ayuda, dirección espiritual.

Las situaciones difíciles van a llegar a nuestras vidas inevitablemente, pero sólo saldremos victoriosos de ellas si nos mantenemos agarrados del Señor, no es nada complicado simplemente asistir más frecuentemente a los sacramentos, permanecer más tiempo en oración, buscar guía espiritual con un sacerdote o alguien que entendamos se deje usar por el Espíritu Santo tantas veces como nuestro corazon lo necesite para lograr deshacernos de las dudas, los temores porque ninguno de esos sentimientos vienen de Dios. Muchos sufrimientos vienen de nuestro propio pecado,dependencias emocionales y otras ataduras que sólo podemos combatir con una real decisión de dejar todo eso atrás y cambiar nuestra forma de ser lo cual a veces es más doloroso que lo que padecemos, por nuestra rebeldía.

Ten confianza, no temas, Dios quiere que seas feliz, quiere que seas libre de todo sufrimiento pero no te va a quitar aquel que te puede hacer mejor y que te moldea para entrar en su reino con la perfección de su hijo Jesús, déjate guiar, puede que ya sepas que mandamiento no has aprendido y no lo quieras reconocer, de lo contrario pide discernimiento y El te iluminará.

"Señor, estoy atadado a acciones que no te agradan, pero de alguna manera el dejarlas me duele mucho, por lo que vengo a ti con corazón contrito y humillado, sabiendo que no lo rechazarás, para que me dés la fortaleza que necesito para salir de esta dificultad con la cabeza en alto, sabiendo que con tu ayuda pude lograr aprender y guardar tus mandamientos. Amen"

Hablé a la ligera,¿Qué replicaré? Job 40,4

El silencio muchas veces, es la mejor opción en tiempos de prueba porque en nuestra desesperación podemos ofender a Dios. Aunque nos cueste aceptarlo nos es imposible entender por completo el por qué Dios permite x situación en nuestras vidas. Si leen el libro de Job verán que el Padre no les explicó porque tuvo que pasar por tantas dificultades, pero le reprendió por intentar saber más que El quien creó todo cuanto existe. Aún así en su infinita misericordia, le bendijo con mayo abundancia de lo que había perdido por mantenerse libre de pecado en tal cruel prueba provocada por el demonio, el único tentador.

Nadie nos ama más que nuestro Creador, de todas formas permite que nos enfrentemos al dolor, la enfermedad, la muerte y toda clase de calamidades; dependiendo de la actitud con la que las enfrentemos, éstas nos servirán para obtener mejor dones espirituales y hasta materiales. no dudes nunca del amor de Dios y su fidelidad en las dificultades, todo lo que El te pide que hagas es que veas, calles y esperes, entonces El actuará.

"Amado Padre, en estos momentos mi vida es una gran catástrofe, todo está mal, pero confío en ti, en tu amor y en que t;u estás en control de todo, sólo te pido que mires a tu sierv@, el que amas porque está sufriendo, pero sé que nadie que haya puesto su confianza en ti ha quedado defraudado por eso, yo te alabo, Señor, yo te canto!"