Bienvenid@!!!

Recibe muuuchas bendiciones de tu Padre Celestial.
Recuerda siempre que Dios te ama con locura!!!
Sonrie siempre pues eres AMAD@!

miércoles, 29 de febrero de 2012

"Cuando sea juzgada esta generación, los hombres de Nínive se alzarán y harán que los condenen; porque ellos se convirtieron con la predicación de Jonás, y aquí hay uno que es más que Jonás." Lc 11,29-32

Hay ocasiones en que le hablo de Jesús a gente que conozco y me cuesta entender por qué se quedan como si fuera una tontería, nada se mueve en sus corazones y me duele recordar estas palabras de Jesús donde El habla de la dureza del juicio para aquellos que no acogieron su palabra.
Sólo el hecho de que la llegada de nuestro Señor cambió la forma en que nos referimos al tiempo, si antes o después de El, el hecho de que cada día hayan más adeptos al Cristianismo, aún fuera de nuestra madre Iglesia, debería poner un foco de atención sobre aquel por quien han muerto tantas personas y que es causa de tanta controversia. Sin embargo, hay quienes se resisten a creer en El, a seguirle, aunque su verdad es tan sencilla y lógica. Qué futuro puede tener un alma que no tiene a Cristo en su corazón, su sola ausencia  demuestra tanta podredumbre que dan ganas de llorar, porque el ser humano sólo alcanza la plenitud con Jesús. En esta cuaresma, recordemos a las personas que aún se niegan a aceptar la salvación y ofrezcamos sacrificios por su conversión.
"Señor, quiero convertirme de mis malas acciones y confío en tu gracia para hacerlo, también quiero pedirte por aquellos que aún escuchando tu palabra no te han aceptado para que toques sus corazones y puedan comprender cuán alto, largo, ancho y  profundo es tu amor, que no se pierda ninguno de tus pequeños, especialmente de los miembros de mi familia. Amen"

martes, 28 de febrero de 2012

"Cuando uno grita, el Señor lo escucha y lo libra de sus angustias;el Señor está cerca de los atribulados,salva a los abatidos." Sal 33

Dios está atento a nuestras necesidades, aún las que nosotros mismos no sabemos que necesitamos. Tener fe en que nuestras oraciones son escuchadas siempre, es la clave para seguir orando sin desfallecer. No se necesitan muchas palabras, Jesús nos dejó el modelo perfecto para orar: el Padrenuestro. En esas palabras que salen de la boca del propio Dios hecho hombre, está todo lo que necesitamos decirle al Padre. No nos  cansemos de repetir esas palabras con devoción y fe. Permitamos que nos den el pan de cada día, que recibamos la gracia de perdonar a los que nos ofenden, que el reino de Dios entre en nuestra vida y nos aleje de las obras de las tinieblas, seamos lo suficientemente humildes para aceptar su voluntad siempre.

"Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo, danos hoy nuestro pan de cada día, perdona  nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en tentación y líbranos del mal. Amen"

viernes, 24 de febrero de 2012

"El ayuno que yo quiero de ti es éste, dice el Señor: Que rompas las cadenas injustas y levantes los yugos opresores; que liberes a los oprimidos y rompas todos los yugos; que compartas tu pan con el hambriento y abras tu casa al pobre sin techo; que vistas al desnudo y no des la espalda a tu propio hermano." Is 58, 1-9

En estos días de Cuaresma, nos proponemos hacer penitencia y abstenernos de comer ciertas cosas. Eso está bien, siempre y cuando no descuidemos el ejercicio de la caridad. Dios nos recuerda en este capítulo de Isaías que de nada nos sirve ayunar y vestirnos de saco si descuidamos el amor fraterno hacia los más necesitados.
Que podamos poner en práctica el mandamiento más importante, que nuestro ayuno sea del egoísmo y de la indiferencia al pasar ante un mendigo, que ayudemos a quienes nos necesitan como una ofrenda agradable al Padre. El nos promete que si hacemos esto, tendremos su apoyo incondicional y un gran tesoro en el cielo.
"Señor, quiero hacer el ayuno que te agrada, permite que yo pueda cambiar de ayunar desde afuera para ayunar en mi corazón del egoísmo, la indiferencia, las palabras hirientes, que sea esta una cuaresma que me transforme en un verdadero adorador, dame tu gracia y tu fuerza. Amen"

miércoles, 22 de febrero de 2012

"Rasgad los corazones y no las vestiduras; convertíos al Señor, Dios vuestro[...]" Jl 2,12-18

Hoy es miércoles de ceniza, inicio de la Cuaresma, por lo que la Iglesia nos invita a prepararnos correctamente para celebrar la pascua. Nosotros somos resultado del sacrificio de amor más grande, la muerte de Jesús por nosotros y estamos llamados a parecernos cada día más a El. Se nos pide que seamos auténticos en todo lo que hacemos y que todo lo que hagamos esté lleno de temor al Señor y de mucha humildad.
Rasgar el corazón significa que pongamos al descubierto nuestras malas intenciones y las dominemos, de forma que hagamos lo que le agrada a Dios, pues de nada nos sirve darnos golpes en el pecho si no hacemos un buen propósito de enmienda. Aparte de las tradiciones que tenemos como católicos y que debemos cumplir, ayunemos no sólo de carne sino de chismes, amargura, quejas, malas palabras, soberbia etc. 
Estos cuarenta días pueden ser de gran bendición para nosotros y los que nos rodean si vivimos el real sentido de la época.
"Señor, quiero rasgar mi corazón y convertirme de mis malas acciones y pensamientos, que en este y todo momento seas tú quien  me dirija y me abras los ojos a cualquier desviación del camino. Que el amor, la humildad y la bondad sean las cualidades que me destaquen desde ahora y por siempre. Amen"

martes, 21 de febrero de 2012

"No tenéis, porque no pedís. Pedís y no recibís, porque pedís mal, para dar satisfacción a vuestras pasiones." St 4,1-10

Cuando examino mis oraciones, puedo ver que tengo más peticiones que acciones de gracias; salud, fertilidad, protección y prosperidad son las cosas por las que siempre pido, pero no siempre recuerdo pedir para que se haga la voluntad de Dios porque sobreentiendo que El quiere que pida por esas necesidades, tanto mías como de mis hermanos, pero realmente será la forma correcta de pedir. 
Muchas veces el camino por el que Dios nos escucha es el de nuestra obediencia, el de nuestra fidelidad hacia su voluntad, si la cumplimos a pesar de nosotros mismos, El nos cumplirá nuestros deseos, pero hay veces en que ni así nos dará lo que pedimos porque El tiene mejores planes para nosotros. Cuando pidamos algo, miremos las circunstancias que nos rodean, a ver si nos muestran el camino que Dios quiere que sigamos, muchas veces no está en consonancia con lo que queremos pero si confiamos en El, sabemos que es lo mejor para nosotros. 
"Señor, ayudame a ser lo suficientemente humilde para aceptar tu voluntad, especialmente cuando no concuerda con la mía, aumenta mi confianza en ti para poder ver con tus ojos y saber que siempre me darás lo mejor para mi salvación, enseñame a pedir como conviene, envíame tu Espíritu Santo para que interceda por mí. Amen"

sábado, 18 de febrero de 2012

no juzgues - hermana glenda

"Todos faltamos a menudo, y si hay uno que no falta en el hablar es un hombre perfecto, capaz de tener a raya su persona entera." St 3, 1-10

No todos los cristianos tienen la carta de Santiago y creo que es por lo fuerte que es, ayer nos hablaba de que no sólo por la fe somos salvados sino por la combinación de las obras y la fe. Hoy nos habla de la lengua, de lo dañina que es  y lo difícil de contenerla. Quién no ha hecho un juicio mal hecho o a divulgado alguna información  sobre otra persona ,desacreditándola, con la lengua maldecimos al que se nos mete en el camino cuando estamos manejando, incluso hemos llegado a desearle mal a alguien o ha condenarlo por sus actos.

¿Y quien nos ha hecho jueces de los demás? ¿Nos manda el Señor ha estas acciones? No, y en aprender a dominar la lengua está la fuerza del Espíritu Santo, sólo con su ayuda podremos aprender a que en vez de maldecir o juzgar aprendamos a bendecir y a orar por los demás. Es muy difícil, sobretodo con los de cerca, pues muchas veces por la confianza que tenemos con nuestros más allegados, utilizamos términos más hirientes con ellos, pidamos la ayuda de lo alto para que no caigamos en la tentación de maldecir ni dañar con nuestras palabras.

"Señor, perdoname por las veces en que he juzgado y hablado mal de mis hermanos, quiero que desde hoy cuando no tenga nada bueno que decir me acompañe el silencio, que pueda aprender a respetar el misterio de la otra persona de tal manera que trate de encontrar algo bueno en ella siempre, ayudame a aceptar al otro como es sin dejarme hacer daño pero sin que yo le falte el respeto sino más bien que ore porque su actitud se parezca más a la tuya en vez de comentarlo con terceros. Amen"

viernes, 17 de febrero de 2012

"Veis que el hombre queda justificado por las obras, y no por la fe sólo." St 2,14-24.26

No es suficiente el sólo decir yo creo en Jesús si estás palabras no están acompañadas de las acciones que identifican a un hijo de Dios, especialmente la práctica de la caridad hacia los demás. La fe en sí misma no tiene valor, sino que es el medio por el cual vamos aprendiendo lo que se espera de nosotros, pero sólo sirve si ponemos en práctica lo que por fe sabemos.
Jesús vino a esta tierra a enseñarnos cómo amar, ese es el elemento más visible en toda su predicación  y su vida. Pero amar no es una palabra, es una acción, una decisión que debemos tomar aún cuando no nos provoca hacer nada por el hermano. Sin embargo, cuando por fe ayudamos a alguien, nuestro corazón se parece al de Cristo, quien sufriendo aprendió a obedecer y la obediencia es una acción no una simple confesión de fe.
Un día estaba en misa y vi a una señor con una niña e inmediatamente sentí en mi corazón la necesidad de ayudarla, a mi me cuesta mucho acercarme a los extraños, además de la incertidumbre de si se iba a ofender, pero sabía que Dios me mandaba a hacerlo, así que desde que terminó la celebración me fui detrás de ella y precisamente se había acercado a una señora para pedirle ayuda porque tenía que hacerle unos análisis a su hija, le dí el dinero y me fui llorando porque sabía que si no hubiera hecho caso de mi fe ella no habría obtenido lo que necesitaba y yo le habría fallado al Señor. Para El la gloria por los siglos de los siglos.

"Señor, que mi fe no sea un cadáver sino que vaya creciendo mediante la entrega y el amor a los demás, aún a pesar de mis miedos, de mi escasez o de mis limitaciones, que pueda yo obedecer tu palabra y no sólo "creer " en ella. Amen"

jueves, 16 de febrero de 2012

"Yo consulté al Señor, y me respondió,me libró de todas mis ansias."

No es fácil mantener la paz cuando las cosas no van como esperabas. Ante una noticia de una enfermedad, el desempleo, la irresponsabilidad de tus suplidores o deudores, el maltrato de quienes te rodean, lo normal es irritarse, preocuparse, desesperarse. Sin embargo, el camino de Dios nos enseña que en esos momentos es cuando debemos acudir a El con toda confianza, esperando su misericordia recibimos el don de la paz.
Cuando tenemos angustia o ansiedad no vemos claramente y podemos tomar decisiones contrarias al plan de Dios para nosotros, pero cuando depositamos esa carga a los pies de la cruz, nos tranquilizamos y actuamos conforme a la voluntad divina. 
"Señor, gracias por darme tus brazos para cobijarnos mientras dura la tormenta, sin ti alrededor me desespero pero contigo soy más que vencedor. Que siempre pueda buscarte a ti antes que nada. Amen"

miércoles, 15 de febrero de 2012

"Hay quien se cree religioso y no tiene a raya su lengua; pero se engaña, su religión es vacía." St 1,19-27

Santiago nos advierte sobre utilizar la religión para despotricar contra los demás, recordemos que el único que puede juzgar es Dios. Somos poco misericordiosos tanto con nuestra lengua como con nuestros actos. La verdadera religión no está en las palabras sino en nuestro trato hacia los demás, sin importar qué tan diferentes sean sus pensamientos de los nuestros. Debemos ser respetuosos de su misterio como personas. Debemos ayudar a aquellos que han sido menos afortunados que nosotros y no tienen todas sus necesidades cubiertas, en esto actuamos como hijos de Dios.
Así como Jesús sanó al ciego luego de sacarlo de la aldea, así nosotros tenemos que alejarnos de los ambientes que propician la mala conducta, pues hay ambientes que potencian nuestros vicios de personalidad y que si no tenemos la suficiente fuerza de voluntad para enfrentarlos entonces lo más inteligente es salir. Permitamos que Jesús nos agarre la mano y nos lleve afuera de todo lo que nos impide ser guiados por su Espíritu Santo, que nos toque las veces necesarias para que podamos ver la realidad con sus ojos y podamos evitar volver a entrar donde podemos ser tentados.

"Amado Jesús, que en este día pueda ver cuál es mi aldea y salir de ella, que pueda ser un cristiano de hechos y no de palabras, que mi religiosidad esté llena de ti siempre y en todo momento, que mi boca calle para juzgar y se abra para contar tus maravillas. Amen "

martes, 14 de febrero de 2012

"Dichoso el hombre que soporta la prueba..." St 1,12-18

Santiago nos aclara sobre las dos formas que tiene el hombre de fallarle a Dios; una es la prueba, aquellas situaciones de enfermedad, escasez, persecución que nos permite afianzarnos en el Señor o alejarnos de El. Los que deciden aferrarse a Dios en medio de la prueba, salen fortalecidos en la fe de una manera que los demás reconocen y dan gloria a Dios por medio de ellos.
Por el contrario, la tentación, viene de adentro de nosotros, es nuestra propia inclinación al mal que debemos aprender a rechazar; el deseo de relaciones prohibidas, el chisme, el lenguaje vulgar, la pornografía, etc. Son vicios que comienzan dentro de nosotros y que podemos rechazar cultivando las virtudes contrarias y con la práctica constante de los sacramentos.
"Amado Señor, que pueda yo ir dejando mis inclinaciones al mal a fuerza de practicar el bien, de amarte a ti por sobre todas las cosas, dame la fuerza y los dones que necesito para salir victorioso de los momentos de prueba y vencer la tentación para no ofenderte nunca más. Amen "

sábado, 11 de febrero de 2012

"¿Cuántos panes tenéis?" Ellos contestaron: "Siete."" Mc 8,1-10

El Señor trabaja con lo que tienes, no te pide que saques de donde no hay sino que como buen líder, potencia tus cualidades buenas a través de su gracia. Meditar en la multiplicación de los panes nos deja muchas cosas, Jesús viene a saciarnos y no sólo con su palabra sino con comida real, por algo es el pan vivo que bajó del cielo. El nos ofrece su cuerpo y su sangre en la Eucaristía, esto es una multiplicación, un milagro inexplicable, pues cómo un sólo cuerpo puede dar para tantas veces por tantos años y para tantas personas. Sólo a través de la fe podemos ver lo maravilloso que hay en cada misa, el milagro de la multiplicación del Cuerpo de Cristo todos los días en todo el mundo. 
Cuán grande es el amor de Dios, fuente inagotable de todo lo que necesitamos. No busquemos a nadie más, no adoremos a nadie más que a El porque El es todo lo que importa y teniéndolo a El lo tenemos todo.
"Señor, tú que puedes darnos tanto, dame la gracia de serte fiel siempre y de crecer en la fe de tal manera que siempre crea que puedes multiplicar en mí lo bueno, que siempre crea que puedo dar de lo que tengo y amar más de lo que quiero porque tú estás conmigo y lo puedes todo, he aquí mi vida, mis dones y mis bienes, te entrego todo para que tomes control de mi. Amen"

domingo, 5 de febrero de 2012

"Alumbre así vuestra luz a los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre que está en el cielo." Mt 5,13-16

La primera lectura nos da la clave para que brille nuestra luz; Cuando destierres de ti la opresión, el gesto amenazador y la maledicencia, cuando partas tu pan con el hambriento y sacies el estómago del indigente. Estas son las obras buenas que harán que Dios responda por nosotros y que los que nos conozcan puedan ver a Jesús a través de nosotros. Como dice Pablo en la segunda lectura, de nada nos vale el conocimiento humano si no tenemos la humildad necesaria para dejar que sea el Espíritu Santo que nos dirija en nuestra predicación y en la vida diaria.
Que podamos ser sal y luz del mundo, dejando atrás las obras y actitudes de las tinieblas. Que podamos liberarnos de toda opresión del maligno y buscar con temor y temblor nuestra salvación y la de nuestros hermanos.Hoy es el mejor momento para empezar...
"Papito querido, ayúdame a ser luz que brille con tu amor e ilumine a todo el que se encuentre a mi alrededor, que pueda yo ser sensible a las necesidades de los más pobres y compartir mi pan con ellos, que pueda tener una palabra de aliento para los que están desanimados y andar siempre bajo tu guía. Amen"

viernes, 3 de febrero de 2012

"Pídeme lo que quieras, que te lo doy." Mc 6,14-29

Debemos tener cuidado con lo que le ofrecemos a los hombres. El rey Herodes se dejó llevar por el impulso e hizo un ofrecimiento a la hija de Herodías que le costó la vida a Juan, un hombre inocente. Lo peor fue que cumplió un delito simplemente por no quedar mal delante de sus invitados. ¿Cuántas veces hemos pecado por dejarnos llevar de un impulso, por estar entre gente que nos induce a desobedecer lo que Dios nos ha mandado?
Cuando crecemos en la fe, nos importa más lo que Dios piensa de nosotros que nuestra reputación delante de los hombres y sobretodo tenemos prudencia al hablar para no ofrecer hacer cosas que vayan contra nuestros principios y valores cristianos. Cuando caemos, pedimos perdón y hacemos penitencia con un propósito firme de no volver a caer. Así aseguramos nuestra victoria en un mundo caótico. Al igual que a David, el Señor nos perdona y nos afianza.
"Señor, que no me deje llevar por nadie para cometer actos que van contra tu voluntad, ayúdame a entonar salmos de alabanza todo el día y a meditar en tu palabra para que siempre sepa hacer lo que te agrada. Dame la humildad de reconocer cuando me equivoco y volver a ti arrepentido. Amen"