"Pues, así como nuestro cuerpo, en su unidad, posee muchos miembros, y no desempeñan todos los miembros la misma función, así también nosotros,siendo muchos, no formamos más que un solo cuerpo en Cristo, siendo cada unos por su parte los unos miembros de los otros. Rm 12,4-5
Jesús no nos llamó para quedarnos solos, viviendo el evangelio para nosotros sino que nos llama a predicar y hacer discípulos suyos a todas la naciones, al mismo tiempo nos dio un papel distinto a cada uno dentro de esa misión general, pero con un mismo sentir: Que todos los hombres se salven.
Es muy reconfortante saber que tienes un grupo de personas que te apoyan, que oran por ti y que te aconsejan a la luz del Espíritu Santo, te aceptan tal y como eres porque poco a poco van viéndote con los ojos de Aquel que te creó.
La comunidad tiene poder porque entre ellos está Jesús vivo y cuando se pide algo con fe y constancia, los testimonios no se hacen esperar, la debilidad de Dios es la oración.
"Amado, Señor, gracias por hacerme entender que sola no puedo avanzar, necesito a mis hermanos, compartir con ellos lo que vivo día a día, interceder por ellos sabiendo que si dos o más se ponen de acuerdo para pedir algo en tu Nombre, el Padre no nos lo negará. Amen"
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