Recuerdo que en mi adolescencia me sentía muy acomplejada y fea, era muy tímida y triste porque no me sentía digna de amor ni amada, según fui creciendo fui adquiriendo mayor seguirdad en mi misma pero fue el Señor quien gradualmente me fue sanando con mucho amor y paciencia. Hoy en día soy tan libre y feliz que en verdad me importa poco la opinión de los demás siempre y cuando Dios apruebe mis acciones. Es su amor lo que me impulsa a predicar ya sea casa por casa, en un retiro o por internet. No tengo talento especial, simplemente El me eligió y yo le obedezco porque no hay para mi mayor alegría que hacer lo que a El le agrada, aunque me cueste trabajo.
Veo con tristeza,a mchas personas a mi alrededor más hermosas, inteligentes, ricas y simpáticas que desperdician su vida en vanidades y viven en función de su lógica humana, cerrando las puertas al maravilloso mundo sobrenatural de Dios donde todo es posible, incluso que alguien como yo se atreva a hablar en SU NOMBRE.
"Señor, gracias pr haberme elegido para formar parte de tu reino, no te fijaste en mis defectos e imperfecciones, mi pobreza ni mi cuerpo sino en mi corazón, que humillado ante ti no busca más que hacerte sonreir, permite Señor, que siempre sea así." Amen!
Veo con tristeza,a mchas personas a mi alrededor más hermosas, inteligentes, ricas y simpáticas que desperdician su vida en vanidades y viven en función de su lógica humana, cerrando las puertas al maravilloso mundo sobrenatural de Dios donde todo es posible, incluso que alguien como yo se atreva a hablar en SU NOMBRE.
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