Qué actitud tan loable la de estos hombres que prefirieron ser echados al fuego antes que faltarle a su Dios. El Padre los libró para dar gloria a su Nombre, pero si no lo hubiera hecho, de todas formas ellos recibirían su recompensa eternamente.
Pareciera que cada día hay menos personas dispuestas a dar la vida por su fe; hoy ni siquiera nos congregamos porque nos es más cómodo quedarnos en casa, nos quedamos callados cuando critican a nuestra iglesia por temor a las confrontaciones o no saber responder, no denunciamos el pecado para no caer mal ni ganarnos enemigos...
Vivimos un cristianismo light lleno de apariencias y tonterías, sin profundizar realmente en la fe, sin constancia en la oración ni en los sacramentos, ¿Creen que puedan resistir si les amenazan con ser echados al fuego para probar su fe? Claro que no, sólo una fe madura puede ser capaz de hacer cualquier sacrificio para cumplir la voluntad del Padre por amor a El. Debemos cultivar una relación con Dios tal que no nos importe lo que pueda pasarnos, porque de El es nuestra vida y nuestra razón de ser.
Si hoy enfrentas una situación donde debas elegir servir a Dios o a los hombres, no dudes en lo primero pues los que confían en el Señor JAMAS serán defraudados.
"Padre, cualquier dolor, prueba que tenga que soportar por ti me parece poco, pues me has dado más, tu que conoces mis debilidades ayúdame a serte fiel en los momentos donde debo dar testimonio tuyo aunque me pueda costar la vida. Amen"
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