La hemorroísa tenía 12 años sufriendo una enfermedad que ningún médico le había podido curar, tenía todas las razones para rendirse. Pero cuando escuchó hablar de Jesús, sus esperanzas se renovaron y pensó que sólo un toque le devolvería la salud y el Señor le concedió lo que su fe esperaba.
La perseverancia es un elemento clave en la vida, especialmente en la espiritual, pues no siempre que pedimos obtenemos lo que deseamos enseguida, esto no significa falta de fe como a muchos "cristianos" les gusta hacer creer. Una de las razones por las que Dios no nos da lo que queremos inmediatamente es para hacernos pacientes, la paciencia es fruto del Espíritu Santo pero se desarrolla en las circunstancias de la vida, al no desesperarnos cuando las cosas no salen de acuerdo a lo planeado. En este mundo todo debe salir rápido y "bien", todo es instantáneo, hay una pastilla o un sobrecito que hace en segundos lo que nos llevaría horas. Pero lo que realmente apreciamos, nos cuesta tiempo, dinero y esfuerzo, no se puede tomar una pastilla para tener una familia unida o salud instantáneamente sino que cada día hay que trabajar en crear lazos fuertes con cada miembro de nuestra familia, comer sano, hacer ejercicios, etc. pero lo que no debemos olvidar es poner todo en manos de Jesús para que con su toque nos bendiga y nos salve.
No hay comentarios:
Publicar un comentario