Jesús es la luz del mundo, El que hizo la claridad en medio de las tinieblas. Cuando confiamos en Él no importan las dificultades, sentimos que hay una mano guiándonos en medio de todas las tormentas. Sabemos que de alguna manera saldremos a camino.
¡Qué bueno es Dios que envió a su Hijo único para iluminar nuestras vidas y poder guiar nuestros pasos por el camino de la paz!
Hoy deja que Jesús ilumine cada rincón de tu vida, de forma que no quede ningún pensamiento, sentimiento o actitud en la oscuridad. Cuando sacamos nuestros pecados a la luz, en el sacramento de la confesión, quitamos las tinieblas de nuestras vidas y abrimos paso a la luz que sólo Jesús nos puede brindar.
Si tienes dudas de qué hacer en tu vida, abre tu biblia y deja que la luz del Espíritu Santo guíe tu lectura de la palabra y puedas encontrar el propósito que Dios tiene para ti hoy.
"Jesús mío, quiero caminar en tu luz por eso te entrego mi corazón para que abras todas las puertas y ventanas y saques cada rinconcito que pueda estar en tinieblas, de forma que todo lo que quede en El sea luz y para tu gloria. Amen"
No hay comentarios:
Publicar un comentario