¿A quién no le gusta el camino fácil? Tener que hacer mucho esfuerzo para lograr muy poco o casi nada es muy frustrante y por supuesto tampoco faltará quien se burle de nosotros. Pero como hijos de Dios, debemos ver más allá de lo que al corto plazo se presenta como la mejor opción. Muchas veces resulta en fracaso al final del camino. Los economistas dicen que cuando te presentan un negocio demasiado bueno para ser verdad en la mayoría de los casos no lo es.
No hay salida fácil con fina feliz, todo lo que en verdad vale la pena en esta vida cuesta trabajo, dedicación, tiempo y dinero: las relaciones interpersonales, cuidar el medio ambiente, la prosperidad, la salud. Sin embargo, la mayoría de nosotros no queremos pasar "trabajo" y nos quejamos muchísimo con Dios cuando no nos toca el camino fácil.
Hoy, El nos recuerda que si parece que no cabemos por la puerta, es porque hemos escogido el buen camino, el que lleva a la vida. Y si hemos escogido bien, no debemos preocuparnos porque el dueño de la vida está con nosotros en cada paso que damos y eso es lo único que importa.
"Amado Padre, cuántas veces me he enojado contigo porque me rodean las dificultades a pesar de todo el esfuerzo que hago en hacer las cosas bien, como tú me lo has pedido, ayúdame a sentir gozo en ellas porque significa que estoy entrando por la puerta estrecha y que este camino tan difícil es el que producirá en mi el carácter de tu Hijo para salvación de mi alma. Amen"
No hay comentarios:
Publicar un comentario